domingo, 18 de diciembre de 2011

¿EXISTE LA PAZ TOTAL?

Actualmente las personas vivimos en un mundo de estrés en los que los momentos de paz pueden servirte de gran ayuda. Ya sea por el trabajo, por lo exámenes, la crisis o por las desgracias que tienen lugar en el mundo, nosotros estamos olvidándonos de nosotros mismos, evitando nuestro bienestar o paz interior.

Esto que he dicho en el párrafo anterior puede sonar muy raro, y también, sé que pensaréis que cómo podemos conseguirla, así que centraré mi entrada en decir si existe la paz total y que pasos deberíamos de cumplir para lograrla.

Para llegar a este estado de bienestar hay que:

Tomar actitudes correctas hacia la vida. Deja de ser evasivo puesto que estas actitudes sólo pueden causar desarmonía en tu vida. Dale la cara a la vida sin miedo y descubre sus verdades y realidades. Resuelve los problemas que la vida te proporciona y encontrarás que el resolverlos contribuye a tu crecimiento interno. Ayudar a resolver problemas colectivos también contribuye a tu crecimiento, y estos problemas nunca deben eludirse.

Vivir tus buenas creencias. Las leyes que gobiernan la conducta humana se aplican tan inexorablemente como la ley de la gravedad. La obediencia a esas leyes nos empuja hacia la armonía, la desobediencia nos empuja hacia la desarmonía. Puesto que muchas de esas leyes ya son comúnmente creídas, puedes comenzar poniendo en práctica todas las cosas buenas en que ya crees. Ninguna vida puede ser armoniosa a menos que creencia y práctica estén en armonía.

Encontrar nuestro sitio en el esquema de la vida. Tú tienes una parte en el esquema de las cosas. Qué parte es ésa sólo lo sabrás yendo adentro de ti mismo. Puedes buscarla en silencio receptivo. Puedes comenzar a vivir de acuerdo con ella haciendo todas las cosas buenas hacia las que te sientes motivado, dando a estas cosas prioridad en tu vida por encima de las cosas superficiales que habitualmente ocupan las vidas humanas.

Simplificar nuestra  vida para lograr que nuestro bienestar interior y nuestro bienestar exterior estén en armonía. Las posesiones innecesarias son cargas innecesarias. Muchas vidas están recargadas no sólo de posesiones innecesarias, sino también de actividades sin sentido. Vidas recargadas son vidas inarmónicas y requieren simplificación. Los deseos y las necesidades pueden llegar a ser lo mismo en la vida del ser humano, y cuando eso ocurra, habrá un sentido de armonía entre el bienestar interior y el exterior. Tal armonía es necesaria no sólo en la vida individual sino también en la vida colectiva.

Una vez dicho esto, sólo me queda decir que para estar en un estado de paz interior hay que realizar todo lo que he puesto anteriormente, además de no dejarse influenciar por lo que ocurre en el exterior: guerras, violencia de género, catástrofes naturales, crisis, exceso de trabajo, agobio por los exámenes, etc. De esta manera seres mejores personas y, además, seremos mucho más felices. Cómo respuesta a la cuestión de mi entrada he de decir que la paz total sí que existe, sólo que es muy difícil conseguirla. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario